Notarios etceterantes

Ejercicio

En el reino de Valencia, el prestigio del colegio de notarios durante los siglos XVI y XVII era tal que ni las partes ni los testigos necesitaban firmar las escrituras, ni aun siquiera el notario necesitaba “firmar singularmente los contratos..., que sólo extendía en la parte esencial etceterando las cláusulas generales” (Fernández Casado, t. I, p. 112, énfasis en el original). ¿Cuál es la posición del notario de tipo romano respecto a las partes? ¿Cómo afectan los costes de la contratación explícita y, en especial, el del oportunismo que se suele generar al explicitar los contratos al papel del notario? ¿En qué se diferencia la actuación del notario de la del abogado de parte? ¿Cómo era (y es) posible semejante confianza en la actuación independiente del notario? ¿Cómo conecta la práctica de “etceterar” las cláusulas generales con lo explicado en el texto acerca del perfeccionamiento esencialmente institucional de los contratos?

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